Hace poco estaba leyendo mi revista de psicología practica y mientras hojeaba las paginas, hubo un artículo que me llamó mucho la atención, el titulo era "lo importante es que te quieran, pero bien", decidí detenerme allí. El articulo trataba sobre las mujeres masoquistas o "malqueridas" como lo citaron allí y lo definieron como "esa mujer cuya pareja la quiere, puede que incluso muchísimo, pero la quiere mal: quiere a una que no es ella, no la ama como ella necesita, la quiere hoy sí y mañana ya veremos, sin comprometerse, sin tomarla en cuenta..."
Mientras leía recordé miles de situaciones a las que pasaron varias de mis amigas y no pude evitar relacionar eso con el trato que constantemente veo que mi hermano hace hacía varias de sus parejas, sí parejas, en plural. Es como si yo ya hubiese pasado por esa situación y es que ya parece una moda, eso de ser malquerida se ha tornado como costumbre o algo normal en las relaciones, tanto era así, que antes de leer ese artículo hasta llegué a pensar que eso era algo así como una etapa en las relaciones, es decir, yo pensé que sufrir demasiado era normal pues, ya que me pareció que todos lo aceptaban, me refiero a que, sufrían e igual seguían con su pareja. Gracias a que leí ese artículo me di cuenta de que todo este tiempo tuve la razón; no es normal ni aceptable que en una relación, uno de ellos dé el 100% mientras que el otro simplemente observe.
Ahora estoy llena de preguntas como, ¿Por qué si estas mal con tu pareja aún sigues con él?, ¿Por qué si has perdido la confianza aún quieres estar con él?, ¿Por qué sigues con él si sabes que te hará daño? Y millones de preguntas parecidas a esa... Pero seguí leyendo y encontré la respuesta a todas esas preguntas; "Una mujer consiente que la quieran mal porque prefiere eso al vacío de que no la quieran en absoluto. Ser abandonada por el amado, quedarse sola, es el peor de los miedos femeninos." Y es por eso que ahora vemos MILLONES de hombres machistas, ¿Y por qué? Porque nosotras mismas los hemos acostumbrado a eso, mientras más nos pisoteen mejor nos sentimos, pues déjenme decirles que no estoy de acuerdo con eso.
Si estás leyendo esto y te sientes identificada de alguna manera, empieza a preguntarte si te estás queriendo lo suficiente. Siempre he pensado que el amor empieza por querernos nosotros mismos para luego querer a los demás.
Si hacemos un breve análisis a estas situaciones podremos ver que se tornan un poco infantiles por el hecho de no poderlas controlar tratándose de personas "adultas y maduras" Claro con eso no quiero decir que las mujeres malqueridas sean inmaduras; muchas veces somos cegadas por los hombres, no nos damos cuenta y es por eso que caemos en esto, me incluyo porque obviamente no estoy/soy inmune a esto, de hecho hay muchas mujeres conscientes de esa situación pero por lo que les dije anteriormente es que prefieren ser malqueridas y es que esta situación es tan fuerte como la adicción al tabaco o a las drogas, desprenderse de estas relaciones destructivas les parece casi imposible.
Lo que quiero decir es que lo importante en esto es reflexionar y tomar fuerza de voluntad para desvincularnos de esas actitudes, el auto-respeto y el amor propio son muy importantes en nuestra vida, debemos valorarnos y debemos estar conscientes de que si esa persona nos humillo una vez, de lo que más podemos estar seguros es que vendrás más humillaciones y depende de nosotros detenerlas. Si no puedes hacerlo por ti misma, busca ayuda de un profesional.
Nosotras debemos romper el esquema de el "amor incondicional", eso sólo lograría que se aprovecharan de nosotras. Estar siempre disponibles no es un buen negocio.
Pero claro, esto no sólo nos pasa a nosotras las mujeres, hay hombres que también padecen de esta conducta pero la mayoría son "malqueredores profesionales" citaré varios consejos de la psicoanalista Mariela Michelena para estos últimos: "no prolonguen innecesariamente relaciones que , de antemano, saben que no van a terminar bien, o que para ellos ya tienen marcada una fecha de caducidad. Que no se comporten como el perro del hortelano, porque a veces sólo por afán de posesión y por tener a la mujer "a mano", la hacen perder un tiempo precioso. Es preferible que rompa, aunque la haga sufrir, a prolongar el dolor sabiendo que antes o después la va a dejar."
Me pareció interesante e importante escribir sobre este tema, sobre todo porque muchos ya lo ven normal y debemos de eliminar ese concepto de que el dolor es igual a vivir en el sufrimiento. El amor debe ser recíproco, es lógico que si amas a una persona detestarías verla sufrir ¿no?.
De aquí en adelante, sufrir es sólo una decisión y tu eliges si escogerla o descartarla.
Fabiola Rondón.
Sábado, 25 de septiembre de 2010.
04:35 a.m.
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